Comida. Uno de los placeres terrenales. Reconozco que soy una de esas personas que disfruta comiendo. Desde pequeña mi madre sabía cuando una comida me gustaba porque según ella “pongo morritos”. Tengo una amiga que dice que cuando me ve comer “le da envidia porque se nota que estoy disfrutando mucho”. Es cierto. Me detengo a saborear aquellos sabores y texturas que me gustan. Y cuanto más los saboreo, más gozo. Es importante detenernos y disfrutar el momento.
Hay gente que come casi por obligación, corriendo y sin pararse a sentir. Y así no hay quien disfrute. Un ejemplo fácil, sobre todo si lo ponéis en práctica: Una cosa es comerse un bombón rápidamente. Y otra cosa muy diferente es comerse un bombón como Diós manda. CON TODOS LOS SENTIDOS. Coger el bombón y olerlo. Pasarle la lengua sintiendo la textura por fuera y ese primer sabor. Moder y sentir si lleva algún fruto seco, algún licor o fruta… Lamer el interior y experimentar si es relleno, cremoso, etc… Meter el resto de bombón en la boca y dejar que se vaya derritiendo. Que se derrita lentamente, centrando toda nuestra atención en la temperatura, la suavidad, el olor y el sabor de ese bombón…Os lo prometo, no es lo mismo.
Y eso mismo hay que hacerlo en el sexo. Porque hay gente que lo hace mecánicamente, porque hay que cumplir, porque al día siguiente tiene que levantarse temprano, porque tiene preocupaciones o simplemente porque le da pereza. Mi consejo es que en lo que a sexo se refiere, lo hagas todo de la misma forma en que deberías comerte el bombón. Como Diós manda: SEXO CON TODOS LOS SENTIDOS. Y no me refiero a hacerlo despacio o deprisa, a hacer más o menos posturas o a moverse más o menos. Me refiero a saborearlo. Disfrutar tanto de aquello que ven nuestros ojos, como también de los aromas que percibimos, de las sensaciones frías o calientes sobre nuestra piel, de una caricia suave o de un golpecito picante. Detenernos a sentir, a oler y a probar. Cada uno que lo haga como quiera, pero que centre su atención en aquello que hace o le hacen.
A continuación os propongo 5 formas de combinar ambos placeres:
- Preparar una buena cena: Puede ser un gran previo. Podemos aprovecharla para degustar alimentos afrodisíacos. Cómprate un buen libro con recetas afrodisíacas. Podemos jugar bajo la mesa con compañía o sin ella, incluso introducir en la velada algunos juguetes que solamente vosotros sabréis que están allí. Insinúate visualmente a través de los alimentos o verbalmente para ir calentando el ambiente...Una buena cena nos llevará a un buen postre, pero mejor todavía si ese postre es literal.
- Convierte a tu pareja en una explosión de estímulos. Puedes impregnar a tu pareja con el sabor que prefieras para que huela deliciosamente y sepa aún mejor. Hay muchos productos que te pueden ayudar a convertir a tu pareja en un sabroso manjar: Comestibles, polvos con sabor, aceites, lubricantes y bodypaints...
- Aprovecha estos alimentos o productos para jugar: Puedes crear un camino de chocolate que tu pareja debe seguir con la lengua, escribir palabras románticas de fresa con champange, o dibujarle corazones de vainilla.
- Si ya le has convertido en un postre, comételo con ganas. No es recomendable poner cualquier tipo de alimento en las zonas genitales más intimas porque puede ser poco saludable, sin embargo hay alimentos que no nos van a perjudicar como el yoghurt También hay productos especiales para estas zonas como aceites íntimos comestibles o para el cuidado.
- Como no fumadora, os animo a cambiar el cigarro postcoito por una fruta, un dulce o un jugo natural. Os dejará mucho mejor sabor de boca.
Si os ha gustado la idea, solamente tenéis que utilizar vuestra imaginación. Para conocer los diferentes productos de los que os he hablado, podéis visitar la página de la Maleta Roja. Si quieres adquirir algunos productos, pero quieres ahorrarte los gastos de envío puedes hacerlo contáctando conmigo.
Sin embargo, para que puedas elegir cuál es el producto ideal para tí, te recomiendo probarlos primero. En nuestras reuniones podrás descubrir la textura, la cremosidad o el sabor que prefieres. Si eres de las que les gusta conocer a fondo el producto que va a adquirir, anímate a organizar una reunión con La Maleta de Sonia y podrás probar todos estos productos en persona y descubrir muchos otros más.
Espero que os haya gustado esta entrada. Si es así, os animo a comentar y darme vuestro like. Podéis seguirme a través de Facebook, twitter o Google+ con el nombre de La Maleta Roja de Sonia.
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